martes, 14 de diciembre de 2021

Las Lecciones del Espíritu Santo


Introducción

Un Curso de Milagros (UCdM) es un curso de entrenamiento mental para ayudarte a encontrar la verdad que un día, tiempo atrás, perdiste de vista. El tema de hoy, apartado V del capítulo 6 del libro de texto, se titula “Las Lecciones del ES”. La palabra “lección” implica que hay algo que aprender. ¿Y qué es ese algo? Un nuevo sistema de pensamiento: el sistema de pensamiento de la mente recta o ES. ¿Por qué tienes que aprenderlo? Porque lo olvidaste para enseñarte mal a ti mism@. Ahora usas el sistema de pensamiento del ego o mente errónea, que te mantiene atrapado en la ilusión y en el mundo, en el miedo y en el dolor. El propósito de aprender las lecciones del ES es, por lo tanto, que puedas escapar de la ilusión y de las consecuencias que te provoca creer en ella, para terminar regresando a tu estado de consciencia de unidad con Dios o de Amor. Dicho así de pronto quizás te resulte utópico, puede que inconcebible, quizás inalcanzable, o puede incluso que te produzca miedo, pero es la máxima meta a la que puede aspirar cualquier “persona” comprometida con la verdad.


"No necesito nada más que la verdad” (L-251)


Voy a tratar de ir rápido y simplificar la parte metafísica que necesitas conocer antes de adentrarme de lleno en el tema de hoy. Cuando se abrevia es inevitable cometer algunas incorrecciones por lo que espero, si conoces el curso en más profundidad, que tengas a bien perdonar las faltas de precisión que cometa.

El ego o la mente errónea es el sistema de pensamiento que fabricó el Hijo de Dios una vez creyó haberse separado de Dios, y puesto a tomar una serie de decisiones apoyadas en el miedo y la culpa que, antes de arreglar su situación, lo que hizo fue complicarla y llevarlo a la situación actual de ensoñación. El ego se convirtió así en un sistema de pensamiento ilusorio creando una división igualmente ilusoria en la Mente del Hijo, lo que quiere decir que, en realidad es falso, no existe, aunque nosotros lo experimentemos como totalmente real. Eso se debe a que pensamos desde dentro de ese sistema de pensamiento y nos confundimos con él. Estamos literalmente atrapados por él.

Paralelamente a la fabricación de ese sistema de pensamiento erróneo, el Padre no nos dejó desamparados, y una parte de nuestra mente aún conserva su estado original, la mente recta o ES, que es nuestro nexo de unión con Él aquí dentro de la ilusión, pero el cual está opacado por los pensamientos falsos de la mente errónea o ego.

El retorno a la Unidad requiere que abandonemos el sistema de pensamiento del ego para ser reemplazado por completo por el de la mente recta, un proceso que requiere la ayuda del ES, ya que nosotros solos no podemos; puedes deducir que porque tratar de escapar de la ilusión apoyándonos solamente en el pensamiento ilusorio del ego nos llevaría a perdernos aún más en la ilusión. Por tal motivo, escapar de ella requiere aprender a escuchar al ES y las lecciones que nos tiene que enseñar para ir deshaciendo poco a poco la mentalidad errónea del ego.

Ocean - Imagen de pen_ash en Pixabay


Las diferencias esenciales

Una de las diferencias esenciales entre el pensamiento del ego y del ES es el enfoque. Mientras el ego hace uso, con demasiada frecuencia, de la negación, el enfoque del ES es siempre positivo. El ES no limita, no prohíbe, no lleva cuenta de tus errores, no mete miedo ni amenaza ni te hace sentir culpable, y nunca te dirá lo que tienes que evitar ni lo que no tienes que hacer (no impone), sino que se enfocará en lo que sí puedes hacer para escapar del daño y ser feliz.


Un buen maestro enseña mediante un enfoque positivo, no mediante uno negativo. (T-6.V.3.1)


Una segunda diferencia es que, el ego analiza los grados de irrealidad para perderse en ellos elucubrando entre una multitud de alternativas o soluciones, en las que se enreda para entrar en un bucle del que le resulta difícil salir. P.e. piensa, ésto es mejor o peor, más o menos grave, más o menos erróneo, más o menos cierto, más o menos valioso, más o menos difícil, etc. El ES, sin embargo, solo distingue entre lo irreal y lo real, lo que es falso o verdadero, punto. Es por eso que para el ES resulta igual de fácil corregir todos los errores del ego, se traten de los que se traten.


Para el Espíritu Santo no hay grados de dificultad en los milagros (T-6.V.A.4.1)


Una tercera diferencia entre el ego y el ES es acerca de la capacidad de comunicación. El ego no comunica nada mientras el ES lo comunica todo. ¿Cómo es ésto? Si te resulta un tanto difícil de comprender es porque estás confundido acerca del verdadero significado de la comunicación. Voy a tratar de explicártelo.

El ego se vale siempre del miedo (encubierto o no), lo cual es una forma de ataque que cierra la comunicación. Los estados que produce el ego no son reales, pero no se puede comunicar lo que es falso ya que no existe, aunque a priori no es esa la percepción que todos tenemos y es por lo que quizás muchos no lo entiendan; pero recuerda que estamos hablando de lo que es real. Dicho de otra manera: las fantasías del ego no pueden escapar de la ilusión por lo que no van a ninguna parte.

Por la razón contraria, el ES sí comunica, y comunica solo aquello que puede darle a todos porque es real. ¿Qué es lo que es real y común en todos? El ser. El resultado de Su comunicación, de sus mensajes, es el estado de conocimiento o re-conocimiento del estado de ser.


El Espíritu Santo, que nos conduce a Dios, transforma la comunicación en el estado de ser, de la misma manera en que en última instancia, transforma la percepción en conocimiento. (T-6.V.A.5.1)


Resumiendo, la mente errónea se caracteriza por:

- Su enfoque negativo.

- Se complica haciendo hincapié en los grados conque se manifiesta lo que es ilusorio. Son los llamados errores de nivel, en los que se confunde y se pierde.

- No comunica nada real a nadie. Usa el pensamiento limitante o hermético del miedo, de la intimidación, de la culpa... el cual es todo falso consiguiendo hacernos sentir aislados dentro de un cuerpo con el cual nos identificamos.

- Por las características anteriores, se percibe como conflictiva ya que sus sistema de pensamiento te aleja de la paz.

La mente recta o ES se caracteriza por:

- Su enfoque positivo

- Su simplicidad. No se complica y simplemente diferencia entre lo que es ilusorio y lo que es verdadero.

- Comunica todo lo que es real a todos. Usa el pensamiento ilimitado y abierto (pensamiento verdadero o pensamiento de Dios) que te identifica con tu espíritu.

- Por las características anteriores, se percibe como serena. Su sistema de pensamiento te produce paz y dicha.

La tercera característica de la mentalidad recta abre paso a la primera lección. Vamos con ella.


1ª Lección: “Para poder tener, da todo a todos”

El aprendizaje de esta primera lección abre paso en tu mente a una fase de puro conflicto, pero esto no te debe de intimidar. Miralo como un paso necesario para alcanzar algo mejor.

Pero ¿A qué se refiere esta primera lección con “poder tener”? Si lees atentamente los dos primeros párrafos de este apartado del Curso te darás cuenta que están dedicados a descalificar la importancia del cuerpo hasta declararlo inexistente. Dice:


El cuerpo es el símbolo de lo que crees ser (T-6.V.A.2.2)


El ego, identificado con el cuerpo, es puramente materialista. Piensa que si da todo se queda sin nada, y tiene razón visto desde su perspectiva.

Recuerda que, como de lo que estamos hablando es de sustituir un sistema de pensamiento por otro, lo que nos concierne aquí es exclusivamente mental, pues esta lección se refiere al pensamiento como causa, aunque luego están sus efectos concretizados en la forma, lo cual es secundario. Lo físico, que es una imagen de lo mental, no deja de ser un “fogonazo” que con la misma velocidad que surge desaparece; un símbolo, como dice el Curso acerca del cuerpo.

Pero regresando a lo mental y a la pregunta que nos hacíamos arriba, ¿qué vamos a poder tener dando todo a todos?. Lo que vamos a poder tener es el sistema de pensamiento de la mente recta.


El Espíritu Santo te dice siempre que sólo la mente es real porque es lo único que se puede compartir. (T-6.V.A.3.2)


A ti te corresponde iniciar el proceso de aprendizaje, pues es tu entera responsabilidad. No esperes que sea fácil. Como principiante mezclarás ambos sistemas continuamente durante un periodo más o menos largo de tiempo que durará lo que tenga que durar. Ello te producirá desasosiego en muchas ocasiones como poco, pero eso no debe desanimarte. El problema no es tanto el conflicto mismo sino que por prolongarse demasiado, te estanques y termines aceptándolo como normal. Si eso pasara, no debes de dejar de pedir ayuda y el Curso dice que se te facilitará.


Puesto que han dado el primer paso, no obstante, se les prestará ayuda. Pues una vez que hayan elegido lo que no pueden completar solos, ya no estarán solos. (T-6.V.A.6.8-9)


Entonces, para poder obtener los beneficios del sistema de pensamiento del ES, tenemos que darlo o extenderlo a todos, sin excepción. Si excluyes a alguien no obtendrás sus beneficios. Eso quiere decir que si, por ejemplo, bendices a todos excepto a quien tú ya sabes por que te hizo aquella faena tan fea que no le perdonarás jamás, entonces tienes un problema. Estarás en contradicción y necesariamente en conflicto.


2ª Lección : “Para tener paz, enseña paz para así aprender lo que es”

El aprendizaje de esta segunda lección abre paso en tu mente a la fase de lo que es más deseable, de los grados de dificultad y del progreso intermitente. Veamos por qué.

Dios no puede estar en nada que no sea similar a Él. De hecho, todo es Él. Sólo lo irreal e ilusorio permanece ajeno a Dios por ser un producto de la mente errónea o mente ego, la cual tampoco existe si no como una alucinación. Sólo Dios Es, pues Es Lo Único que Existe y no existe nada fuera de Él. Por ello, Dios desconoce este mundo y nada tiene que ver con él y con lo que en él sucede pues Dios sólo puede estar donde Su Paz Es la condición reinante, y el pensamiento de la mente recta (ES) goza precisamente de esa paz. Es por eso también que el ES observa el mundo reconociéndolo como la ilusión que es, y no actúa en él tratando de llevar la verdad a lo que es falso; antes bien, lo que hace con su juicio es llevar lo ilusorio ante la verdad para corregir los errores de pensamiento del ego y des-hacerlo a través de los milagros (milagro=corrección).

Regresar a la Unicidad con Dios requiere que alcancemos el estado de paz y dicha constante que proporciona la mente recta, lo cual se puede lograr cuando compartes este sistema de pensamiento con todos, sin ningún tipo de restricción, pues lo integras y lo haces enteramente tuyo. Lo anterior quiere decir que tu paz no puede estar condicionada por lo que hagan o dejen de hacer los demás. Si tu paz se quiebra, no es aún el tipo de paz de la que estamos hablando.

Por eso esta lección reza que para tener paz hay que enseñarla, que no es tanto enseñar como alcanzarla sino a dar ejemplo estando uno mismo en paz, sean cuales sean tus circunstancias.


Eres lo que enseñas (...). (T-6.V.B.1.4)


La verdadera paz no depende de ninguna condición externa a ti, ni de conseguir estar sol@ o sólo en presencia de determinado tipo de personas que no te alteren. Lo anterior sería depender de un estado “más deseable” sujeto a “grados de dificultad” que la vida no siempre pondrá a tu disposición todo el tiempo, lo que hace que tu progreso hacia la paz se manifieste de manera “intermitente”. Por ello tienes que aprender a aceptar toda circunstancia y a toda persona tal como son, que no quiere decir que tengas que convivir por siempre en las condiciones y con las personas que no te gustan. La forma de sentir del ego es que cuando las cosas no se desenvuelven como desearías o no estás rodeado de las personas que quieres, no estás en paz.

El sistema de pensamiento del ego y del ES son auto-excluyentes siempre y en todo momento, y aquel que no usas se debilita en favor de aquel que estás utilizando. La mejor manera, pues, de asegurarte que estas enseñando paz es utilizar el pensamiento de la mente recta extendiendo su uso a toda situación y con todo el mundo sin excepción, de manera natural y sin forzar nada.


(...) cuando no compartes un sistema de pensamiento, lo debilitas. (T-6.V.B.1.7)



3ª lección : “Mantente alerta solo en favor de Dios y de Su Reino”

El aprendizaje de esta tercera lección abre paso en tu mente a la fase de los constantes cambios de ánimo antes de que se produzca el cambio fundamental. Ahora verás por qué.

Mantenerse alerta implica que existe algo contra lo que tienes que mantenerte vigilante. Aquí no valen los niveles, los grados de dificultad, ni el estar más o menos alerta de la segunda lección. Ese algo contra lo que se te pide que estés alerta no es otra cosa que tu viejo sistema de pensamiento y los conflictos derivados de su manera de pensar. Se trata de la consciencia vs. el caos, del todo de la verdad vs. la nada de la ilusión. Tu atención permite que el juicio del ES entre a jugar un papel fundamental en tu mente separando lo falso de lo verdadero, cosa que no puedes hacer si andas dormido o distraído. El ES actúa como un auténtico filtro selectivo con vistas a reforzar tu mente recta y unificada propiciando tu estado de dicha. Pero lo que es rechazado por el ES es aceptado por el ego, ya que Aquel es el opuesto de éste, y el ego, identificado con el cuerpo, se mantiene aferrado a sus creencias y a los juicios que te provocan caos mental, problemas y constantes cambios de ánimo. Así que cuando el ES juzgue en su contra, el ego vendrá a enredarte con sus reflexiones y a desanimarte. Al principio el estado de alerta que nos ocupa lo experimentarás con cierta tensión al parecerte que tienes que estar eligiendo entre el ES o el ego, hasta que un día descubres que tu nuevo sistema de pensamiento se ha asentado y que ya no tienes que elegirlo en absoluto. Tu mente recta habrá tomado la delantera a tu mente errónea, y habrás dado el paso hacia el cambio fundamental, por lo que podrás relajarte.


Resumen

Cada lección es una prolongación o desarrollo de la anterior; la segunda de la primera y la tercera de la segunda.

La primera lección que necesitas aprender para poner en marcha el proceso de inversión del pensamiento del ego al pensamiento del ES consiste en el des-hacimiento del concepto “obtener”. Para el ego “obtener” y “ser” son diferentes. Para el ES “obtener” es lo mismo que “ser”. Aquí parece existir una contradicción y por ello esta lección es la más difícil de aprender debido a la resistencia del ego, quien solo sospecha de la idea y la percibe como un auténtico disparate. Pero hasta que no aceptes plenamente la verdad del ES abandonando la verdad del ego, no cesará tu conflicto. Esa aceptación llega cuando pones en práctica la segunda lección.

La segunda lección dice que enseñes paz siendo tú mismo esa paz, y es así que la obtienes. De esta manera “ser” y “obtener” se funden en una misma cosa. Esta lección es una afirmación de lo que deseas con más o menos intensidad, por lo que aún falta la consistencia suficiente para poder consolidarse como algo estable y duradero. Es por lo que, mientra llega esa estabilidad, que nuestra mente aún pelea consigo misma avanzando de manera intermitente al creer en los grados de dificultad que causa la percepción errónea, la cual hay que dejar atrás.

Necesitamos alcanzar un estado de paz constante y duradero para lo que el proceso de inversión del pensamiento tiene que ser total para que sea efectivo. Esto sólo se puede conseguir estando alerta en favor de Dios y de Su Reino, consiguiendo abrir paso a lo que el Curso llama el mundo feliz. Es entonces que Dios podrá dar el último paso y rescatarnos.


El símil de regresar al mar (o aprender a nadar)

Dicen que la primera célula viva en el planeta Tierra apareció en el mar, y que luego de volverse una forma de vida más compleja se trasladó a tierra firme en un proceso evolutivo que duró millones de años. Imagina que la tierra es el sueño del mundo y que tú eres una de esas formas de vida compleja, un humano, que después de transitar durante una edad geológica por tierra firma, ya te has cansado de vagar, pasar penalidades, y quieres regresar de nuevo al océano, a tu origen (el Cielo o tu estado de Unicididad con Dios). Si lo anterior te resulta muy trascendente, imagina mejor que simplemente deseas aprender a nadar.

Water – Imagen de Esther Merbt en Pixabay

Lo primero que haces es desvestirte o aligerar tu ropa. La dejas en la orilla y te metes en el agua por propia iniciativa, porque así lo deseas y lo has decidido. Esto es el equivalente a la primera ley del ES. Si “para poder tener, tienes que dar todo a todos”, para poder aprender a nadar tienes que meterte por entero en el agua. Las vestiduras son simbólicamente todo lo que concierne al ego, nuestras creencias, lo que nos confiere nuestra apariencia y personalidad. Pero no te desnudas y te zambulles de cabeza de una vez. Tu desconfianza hace que te metas poco a poco y con algo de ropa, primero hasta los tobillos, luego hasta la rodillas, después hasta la cintura, le sigue el pecho y nunca más del cuello porque quieres conservar la cabeza con la vista en tierra, no te vayan a robar la ropa que has dejado en la orilla. ¿¡cómo si no ibas a poder regresar luego afuera!? En tu primer baño sólo estás probando el agua y quieres mantenerte seguro de tu regreso. Eres un principiante, un aprendiz a nadador espiritual. Quisieras zambullirte hasta lo más profundo pero no lo has hecho nunca y te da miedo. No sabes nadar. Además desconoces la profundidad del agua, sus peligros, y no quieres perder tu vida terrenal a la que le tienes gran apego. Así que resulta que tu situación es conflictiva porque te debates entre el deseo de nadar libremente en el mar y el de seguir conservando tu vida en la tierra. Por eso no dejas de tocar el fondo con los pies o de asirte a alguna rama o roca para sentirte seguro mientras estas en el agua.

Boy - Imagen de DanaTentis en Pixabay

Llegamos a la segunda lección que dice “para tener paz, enseñas paz para así aprender lo que es”, cuyo equivalente es “para aprender a nadar haces como que nadas para aprender lo que es”. Enseñar no quiere decir que enseñes a otros que están metidos en el agua contigo, o que te están mirando desde la orilla. ¿Cómo ibas a enseñarles si tu mismo no sabes nadar aún? Pues aún así puedes enseñarles aunque sean las ganas que tú tienes de hacerlo. Este es el caso de muchos facilitadores del Curso. Puedes ponerte en ridículo e incluso ahogarte pero muchos son autodidactas y tan habilidosos que terminan aprendiendo y enseñando de verdad. Son valientes y se dejan llevar por el deseo de aprender ellos mismos antes que dejarse llevar por los prejuicios. Así que te vas animando y de un “saltito” sumerges la cabeza para salir de seguida a respirar. Lo vuelves a hacer pero esta vez un poco más largo; y así, a base de ir probando y probando consigues dar alguna brazada y sostenerte unos segundos sobre el agua sin poner los pies en el fondo ni agarrarte a nada. Algún susto te llevas, eso sí, pero es normal. Recuerda que esta segunda lección se manifiesta como la fase de los grados de dificultad, de lo que es más deseable (nadar a guardar la ropa), lo que produce un progreso intermitente.

Dive - I magen de TeeFarm en Pixabay

Y llegamos a la tercera lección que dice “Mantente alerta solo en favor de Dios y de Su Reino”. El equivalente en nuestro símil es “mantente alerta solo en favor del mar y de nadar”. Ya consigues mantenerte a flote por un largo rato, si bien de manera torpe y no sin tragar agua de vez en cuando. Hasta ahora tenias un ojo puesto en el agua y otro en la orilla, de la que no apartabas tu atención preocupado por tus pertenencias y por lo que piensen los demás. Pero tu progreso y el deseo de perfeccionarte hace que ahora te concentres más en lo que estás haciendo y empiezas a disfrutar realmente de tu baño, aunque no sin cambios de ánimo. Puede que por momentos te sientas tentado de salir del agua porque esperabas nadar 100 mts en 15 segundos pero has hecho 16, o porque te da un calambre, o quizás echas de menos a alguien en tierra firme, pero tan pronto piensas una cosa piensas la contraria animado por tu progreso. Al fin y al cabo no tienes que batir los records de Michael Phelps, te has aclimatado mejor que al tiempo cambiante de afuera y tu decisión ya es irrevocable, aunque eso suponga separarte de tus pertenencias y/o de alguien definitivamente.

Mermaid - Imagen de Sergei Tokmakov Terms.Law en Pixabay

Así llega un momento en que dejas de aprender lecciones y te vuelves un nadador consumado. No tienes que nadar más rápido ni tener más resistencia que nadie. Existen muchos tipos de peces en el mar y tú te has vuelto uno más de ellos, un solo ser con el océano, una especie de siren@. Te has adaptado tan bien que finalmente decides quedarte a vivir ahí y te olvidas por completo de tu antigua vida en la tierra. Entonces te adentras aguas adentro y te sumerges en las profundidades.


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domingo, 21 de noviembre de 2021

Un Cuento Sobre el Perdón


Tomador (Tomador de Decisiones es el nombre y su apellido) era un ciudadano del reino mágico de Nada Nunca Ocurrió. Nada Nunca Ocurrió estaba regentado por el rey Ego I y toda su corte de “nobles”, criados y servidumbre, funcionarios, así como por un poderoso ejército para proteger el reino. Se gozaba de relativa paz y libertad, así que las dos últimas generaciones habían vivido en prosperidad y abundancia, lo que había permitido que la población se multiplicara en número significativo, progresando a tal nivel en calidad de vida, que mucha de ella nada tenía que envidiar en comodidades y riqueza ni al mismísimo rey.

Building - OpenClipart-Vectors en Pixabay

Pero algo sucedió de repente un día. Se anunció una extraña enfermedad, una peste contagiosa que empezaba a propagarse por los reinos vecinos.

- No os preocupéis – decía el rey a sus súbditos – aquí no llegará. Somos un reino avanzado y estamos muy bien preparados.

Pero al poco, la enfermedad se hizo presente, y el rey anunció que por el bien del reino, decretaba el cierre de los negocios y el aislamiento total dentro de los domicilios de todos sus súbditos, puesto que había que evitar la propagación. Pero la gente empezó a morirse igualmente de forma extraña, o al menos eso gritaban a bombo y platillo los pregoneros reales por las calles. La población estaba aterrorizada. Nadie sabía como combatir la rara enfermedad, la cual golpeaba una oleada tras otra sin dar tregua apenas a que la gente se recuperase. Por eso veía como se hundían sus negocios y sus ahorros menguaban rápidamente devorados por el incremento de los precios y los impuestos.

Pero un día el rey anunció la solución. Un hechicero extranjero, con no muy buena reputación (qué importaba si traía la solución), ofreció su pócima secreta la cual prometía la protección para todo aquel que la tomara. Eso sí, como era una ayuda desinteresada, no podía revelar sus ingredientes ni respondería ante la justicia si a alguien en concreto no le sentaba bien. La gente vio una salida y empezó a acudir en masa a los puntos donde se dispensaba el bebedizo, esperanzados por la promesa del remedio milagroso. Pero Tomador dudaba. Sí, Tomador, que no era precisamente miedoso, sospechaba sobre cómo se habían ido sucediendo todos los acontecimientos. Veía y escuchaba cosas que no le cuadraban y que se le antojaban harto extrañas e incoherentes; así que, decidió consultar a un vidente muy certero que ya había visitado otras veces con éxito.

- Todo es una grandiosa y muy bien organizada mentira - dijo el vidente a Tomador - El rey, sin escrúpulos, quiere tomar la vida de sus vasallos, ingenuos e ignorantes, envenenándolos con la pócima del siniestro mago, la cual tiene efectos retardados para que no se sospeche, para luego apropiarse de todas las riquezas mientras mantiene sus privilegios. El rey ha visto como el pueblo se multiplicaba y enriquecía continuamente acaparando las riquezas limitadas del reino, lo que consideró una amenaza. Por eso se confabuló con un círculo de allegados y con los reyes de los otros reinos. Ha sobornado a los curanderos con el dinero que recauda de los impuestos, a los barberos sacamuelas, a los trovadores y juglares, a los principales funcionarios, a los altos mandos del ejército y a otras muchas personas clave, para que silencien lo que saben mientras animan a todo el mundo a tomar la pócima. Están haciendo todo en secreto porque de otra manera se produciría una pronunciamiento generalizado que acabaría con él y con todos sus privilegios especiales.

Tomador no podía creerlo. Bueno sí, pero ahora, confirmadas sus sospechas, no sabía qué hacer y tenía que decidir, porque él siempre decidía haciendo honor a su apellido. La incredulidad del primer momento dio paso en él a un sentimiento de fuerte indignación y rabia. Empezó a contar discretamente lo que sabía a sus familiares y amigos más íntimos para advertirlos, pero no todos le creían y lo miraban incrédulo o se reían de él. Muchos de ellos no le hicieron caso y tomaron la pócima. Tomador se preocupó más aún y empezó a contarlo también a otra gente, y descubrió que había alguna de ella que sospechaban lo mismo que él, pero sin organizar eran incapaces de hacer otra cosa que advertir y advertir. Así que la noticia de que había habladurías y vasallos que se negaban a tomar la pócima llegó a oídos del rey, quien temeroso, cortó secretamente alguna cabeza y aumentó los sobornos, ahora para promulgar que la peste era portada por aquellos “hijos del demonio” que se negaban a tomar la pócima, y que ellos eran los apestados que la transmitían. Por ello, los que se resistían empezaron a ser señalados, discriminados y aislados. Las cosas se empezaron a poner realmente difíciles para Tomador quien pensaba en muchas diferentes alternativas:

- Podría irme a vivir a un reino extranjero, pero está sucediendo lo mismo en todas partes. O podría luchar y enfrentarme directamente al rey y sus secuaces, pero no sé luchar y él tiene además un ejercito. O podría formar una resistencia con otros que piensen igual que yo para derrocar al rey, pero tiene espías por todas partes y pronto acabarían con nosotros. O podría esconderme en un lugar secreto y esperar que todo pase, pero ¿y si no pasa?. O podría rendirme y tomar la pócima con la esperanza de que no me hiciera efecto, siempre con la incertidumbre del momento en que la muerte pueda venir a llevarme de forma inesperada. O...

Confundido de pensar tantas alternativas, totalmente agotado, sintió que entraba en un profundo trance, y entonces tuvo una revelación. Se vio rodeado de una luz inmensa y una Voz gentil empezó a hablarle de una forma tan amorosa que jamás había sentido nada igual.

- Puedes decidir desde el miedo o desde el amor – le dijo la Voz a Tomador – Todas esas diferentes soluciones que has pensado están basadas en el miedo, pero el amor en completo estado de paz, no decide en atención a la forma, a lo que pasará. Escucha las siguientes verdades:

1ª El reino mágico de Nada Nunca Ocurrió no existe, lo estás imaginando, y nada de lo que imaginas importa porque solo es un sueño. Lo que importa es cómo lo sueñas, y nuevamente volvemos al asunto del miedo y del amor. ¿Experimentas tu sueño con miedo o con amor?

2ª Todo tu mundo es imaginado y todo en él está en tu mente. No existe nada externo a ti, por lo tanto, examina siempre lo que piensas, no lo que hacen o dejan de hacer los demás. Vuelve tu mirada hacia tu interior.

3ª No eres una víctima de nada de lo que parece suceder. Ello no es más que producto de tus propios pensamientos de carencia, culpa y miedo, los cuales proyectas afuera a través de la percepción porque rechazas tenerlos dentro de ti.

4ª Eres el responsable de lo que parece sucederte pues la causa está en tu sistema de pensamiento basado en el miedo, el cual podrás corregir y cambiar por el Mío basado en el amor cuando así lo desees.

5ª Si el origen de tu experiencia está dentro de ti, siendo responsable de ella y pudiendo modificarla, eso quiere decir que tienes todo el poder. Tu poder se basa en que puedes decidir. Decide en favor del amor.

6ª El amor siempre perdona. Perdona la percepción de tus experiencias sabiendo que en realidad no están teniendo lugar sino en tu mente. Entrégame tus percepciones y yo las corregiré para que las veas con pensamientos amorosos. Entonces dejarás de tener miedo.

7ª La Visión amorosa que Yo te doy no necesita que hagas nada a nivel del sueño, a nivel del mundo, porque lo que perdonas tiene inmediatamente su reflejo en el nivel de la forma. Perdonar es el proceso mental de re-pensar tu experiencia de “sin amor” a “con amor”. Al repensarla tu experiencia cambiará por sí sola de ser tenebrosa a ser bondadosa. Ya no tendrás que pensar alternativas, ni hacer planes en tal y cual situación.

8ª No hacer nada incluye también no hacer sacrificios. El sacrificio, que no es amoroso, es una trampa de tu sistema de pensamiento erróneo para mantenerte atrapado en él. Lo mismo se puede decir del autocastigo o de dejarte infringir daño físico o psíquico, mediante lo que denominas “buenismo”. No es amoroso transigir con tus derechos hacia los demás cuando éstos te causan daño y dolor; por el contrario, es debilidad. El amor es fortaleza.

- ¡Oh, Maestro de Luz! ¿Puedo preguntarte?

- Dime

- ¿Y qué ocurre con los que se dejan hacer daño siendo engañados?

9ª La ignorancia es una forma de victimismo inconsciente. La persona que se deja hacer daño sin ser consciente de ello es porque así lo ha elegido a un nivel que ha olvidado. Nada discurre de manera fortuita y tu experiencia en el sueño siempre responde a tus pensamientos, de los cuales no siempre eres consciente. Repito: nadie es víctima. A la 4ª verdad me remito. En estas verdades no hay excepciones o no serían verdades.

Y 10ª Todo ataque o petición de sacrificio que percibes proveniente del sueño es en realidad una petición de ayuda y de amor procedente de ti mismo, el cual crees que viene de otros. Es la 3ª verdad. Nadie parecerá atacarte ni pedirte que realices un sacrificio cuando sanes tu miedo y tu culpa. Entonces descubrirás que no hay nadie más y que todos somos Uno. Tú y Yo Somos Uno.

Decide con amor, decide perdonar lo que nunca ocurre, ocurrió o ocurrirá. Recuerda que el perdón tiene que ver con perdonar tus pensamientos erróneos. Cuando alguien te ataque o te pida sacrificio, y observes que pierdes tu paz, eso significa que ha llegado la hora de perdonar. Entonces, entrégame tus pensamientos temerosos a Mi y yo con mi poder los sanaré haciéndote ver de otra manera. Luego confía y acepta lo que ocurra a partir de ahí en tu experiencia teniendo la certeza de que es lo que tiene que ocurrir.

Este es el secreto de tu salvación: todo lo que parece sucederte en el sueño te lo estás haciendo tú mismo. La vida que sueñas tener es un cuento que tú mismo has escrito; un cuento acerca de querer ser especial y vivir en un personaje separado de Mí, para luego, finalmente regresar de nuevo a Mí. Puedes regresar a Casa cuando así lo decidas. Te estaré esperando siempre con los brazos abiertos.

Entonces Tomador empezó a salir del trance, pero recordaba todo perfectamente, como si hubiera sido realmente real; mucho más real que la realidad donde se desarrollaba la historia del reino de Nada Nunca Ocurrió, con la peste y todo esa trama medieval de intriga, engaño y muerte, la cual parecía ahora un verdadero cuento.

No voy a contar, valga tanta redundancia, como acaba la historia de Tomador de Decisiones. Más bien te voy a decir que te apliques el cuento. No sé si se utiliza esta expresión en tu reino, pero si no, averígualo y luego toma tus propias “decisiones” al respecto. A pesar de estar ya escrito, la paradoja es que, en este cuento cada aparente “yo” puede escribir su final, o al menos eso parece.


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viernes, 15 de octubre de 2021

Los 7 Hábitos de la Gente Altamente Efectiva... aplicada a UCdM? (Resumen)

Imagen tomada de la web


Conclusión:

El libro de Stephen Covey tiene por objeto el desarrollo y la eficiencia personal, pero UCdM dice que no eres una persona. ¿Cómo se digiere ésto? Veamos. Cada libro es de lo mejor para su propósito en su campo específico.

Ambos libros están destinados a cambiar tu manera de pensar y de actuar. El libro de Stephen Covey está escrito para volver altamente eficiente y productiva tu personalidad. No dudo que muchos de sus consejos hayan sido inspirados por la Mente Recta. Pero mientras éste libro te ayuda a alcanzar la máxima eficiencia personal, buscando simultáneamente el beneficio de los otros, para ganarte el mundo, UCdM va más allá al ayudarte a alcanzar la máxima eficiencia mental, que es utilizar tu mente recta, de cara a trascender el mundo. Un libro te ayuda a anclarte al mundo, el otro a des-anclarte de él.

La salvación ya se produjo. Recordamos lo que nunca sucedió atraídos por el deseo de las ilusiones, y mientras éstas nos sigan atrayendo estaremos destinados a recordarlas reviviendolas una y otra vez. Hasta que no dejemos atrás ese deseo seguiremos haciendo este mundo real y viendo lo que no está ahí. Tomarte totalmente en serio “los 7 hábitos de la gente altamente efectiva” resulta ser al final una trampa más de la mente-ego deseando sentirse especial; un entretenimiento para evadir la verdad; una técnica depurada para hacer más puntera nuestra personalidad actuando en el mundo en el que parecemos vivir y hacer reales las ilusiones que aún nos siguen atrayendo al caer atrapados en ellas.

Si tomarse totalmente en serio los 7 hábitos de la gente altamente efectiva es un libro de magia por cuanto que hace realidad lo ilusorio resolviendo problemas o logrando cosas que en realidad no existen sino como una proyección de la mente-ego que nos sueña; rechazar el uso de estos hábitos a partir de esta lectura o reaccionar de manera negativa a ellos no haría sino reforzar aún más su realidad. ¿Por qué no usar la ilusión para tratar con la ilusión? De hecho hay que hacerlo mientras estemos dentro de ella al obedecer sus leyes. Perdonar no es más que eso, quitar yerro a las ilusiones y usarlas sin culpabilidad, ¡pero con responsabilidad! No vale decir que como todo es ilusión hago lo que me da la gana. Así que... está bien usar los 7 hábitos siendo consciente de que los estás haciendo y mientras no te dejes guiar o vencer por el ego.

El objetivo del Curso es el perdón, que no es más que despejar los obstáculos a lo que es verdad en ti y a tu paz interna; y si el uso de los 7 hábitos o de alguno de los siete hábitos, bien enfocados, te ayudan a conseguirlo, bienvenidos sean. Así que, utilízalos sin volverlos un fin en si mismos, y sin preocuparte de sus resultados.



Resumen:

1er hábito. Sé “proactivo”. Mantente alerta sólo en favor de Dios y de Su Reino” (T-6.V.C) (3º ley del ES). Enfócate en desarrollar la Visión o Percepción verdadera que te permita vivir en el mundo sin ser del mundo. No eres un cuerpo buscando la excelencia personal y la libertad individual en la consecución de una serie de metas mundanas e ilusorias que pueden ser muy nobles, sí, pero que como todo aquí están sujetas al fracaso y/o a la decadencia. Claro que puedes fijarte ese tipo de metas pero ya no te condicionan ni te atan, pues no importa lo que ocurra. Ser “proactivo” implica elevarte por encima de todas ellas sabiendo que tu libertad se haya en el desapego a las cosas del mundo.

2º hábito. Empieza cada día con el fin en mente que es conseguir la Paz de Dios cumpliendo con la lección segunda del ES: “Para tener paz, enseña paz para así aprender lo que es” (T-6.V.B). ¿Cómo se enseña la paz? Aprendiendo a estar en paz uno consigo mismo; siendo “proactivo”.

3er hábito. Establece primero lo primero, y lo primero es comprometerte con el proceso de la Expiación, que es la corrección de los errores de tu mente que te hacen tan infeliz, hasta percibir correctamente, lo cual te devolverá finalmente al estado de dicha, consciencia Cielo o de Unidad con Dios.

4º hábito. Piensa en ganar-ganar sabiendo que todo lo que haces te lo haces a ti mism@ (L-216) y puesto que vives en un mundo-espejo que funciona a través de la proyección. Por eso, para poder beneficiarte de los efectos de la Expiación, extiende tu nueva manera de pensar hacia todos sin excepción viendo inocencia en todo y en todos, pues como dice la primera lección del E.S.: “Para poder tener, da todo a todos” (T-6.V.A). Pero todo no es “Todo”. Está todo lo del ego y Todo lo del ES, lo cual a veces se confunde. Necesitas la guía del ES para que te diga como compartir lo que es sólo Suyo.

5º hábito. Para diferenciar el "todo" del Todo, procura primero comprender y después ser comprendido. Aprende a escuchar y dejarte guiar por el ES. Para que funcione Su corrección en tu nueva manera de pensar necesitas Su guía infalible. Una vez Le comprendas te sabrás comprendido.

6º hábito: Para dejarte guiar necesitas utilizar la sinergia con el ES. Confía en Él y sé responsable con su enseñanza, aplicándola de manera práctica para completar tu aprendizaje.

7º hábito: Por último, afila la sierra de perdonar. Esto no es una labor de un día sino de toda la vida porque el ego es muy enrevesado, tienes muchos nudos y es tan persistente que no se va a dejar deshacer rápidamente. Por eso, necesitas desarrollar la confianza mientras aprendes a perdonar; perdonar una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez, hasta que deshagas toda tu culpa inconsciente y puedas completar la Expiación.



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Los 7 Hábitos de la Gente Altamente Efectiva... aplicada a UCdM? (7ª Parte)


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7º hábito: Afila la sierra

En un mundo de constante cambio, preocúpate de seguir mejorando cada día. Renuévate, física, mental, social y espiritualmente todo cuanto puedas. Afilar la sierra implica poder ofrecer lo que nadie más ofrece. Para ello tienes que ser más competitivo, mejor que los demás en tu especialidad o el único en lo que haces ¿Cómo puede estar en paz alguna vez una mente que tiene que renovarse constantemente para ser especial? No puede. Si estás continuamente preocupado por afilar la sierra, preparándote físicamente para mantenerte en forma, haciendo cursos de capacitación, promocionándote de cara a la mejor imagen o haciendo méritos para ser mejor persona y elevar tu vibración, entonces, cada vez que no hagas “lo suficiente”, este hábito puede volverse una pesada carga. Pero pregunto: ¿Cómo sabes que en tus prácticas estás afilando realmente la sierra, que estás mejorando y haciendo lo que más te conviene a ti y a los demás? Sencillamente no lo sabes.

Deja que el Espíritu Santo sea tu guía en todo, y no te vuelvas atrás. Confía en que Él responderá de inmediato y con Amor a todos los que de algún modo se vean afectados por tus decisiones. Y todo el mundo se ve afectado. ¿Te echarías al hombro la responsabilidad de tener que decidir qué es lo único que redundaría en beneficio de todos? ¿Cómo ibas a saberlo? (T-14.III.17.4-8)

No quiero descalificar ninguna enseñanza de superación personal, las cuales son muy válidas para lograr las metas y propósitos que te hayas marcado, dependiendo de la situación de vida por la que estés atravesando; pero a donde quiero ir es más lejos, a otro nivel diferente.

El ego anda siempre exigiendo sacrificios porque necesita controlar, ya que se trata de una auténtica máquina de supervivencia. ¿Cuál sería el equivalente a este hábito en UCdM? Simplemente ninguno. El Curso dice:

El Espíritu Santo nunca exige sacrificios, el ego, en cambio, siempre los exige. (T-7.X.V.5)

También añade:

La Voz del Espíritu Santo no da órdenes porque es incapaz de ser arrogante. No exige nada porque su deseo no es controlar. (T-5.II.7.1-2)

El hábito más parecido a éste, sin recurrir a autoexigencias ni sacrificios, sería la capacidad de entregarnos al proceso de la Expiación, facilitando el despertar de nuestro verdadero ser, el cual permanece velado, siendo lo máximo a lo que podemos aspirar en este mundo ilusorio de dolor y culpa. Se trata, pues, de alcanzar el mayor estado de perdón y de sanación que nuestro guion nos permita desarrollar. Por eso quizás debiéramos preguntar ¿qué diferencia a un verdadero Maestro de Dios de un estudiante aprendiz del Curso?

Para responder hay que irse hasta el apartado 4 del Manual para el Maestro titulado “¿Cuáles son las características de los maestros de Dios?” Esas características son: I. Confianza, II. Honestidad, III Tolerancia, IV Mansedumbre, V Júbilo, VI Indefensión, VII Generosidad, VIII Paciencia, IX Fe, X Mentalidad abierta

Como ves, ninguna de ellas es la competencia o la competitividad y mucho menos el sacrificio. Todo lo contrario. Además se dice al principio del apartado II. Honestidad:

Todas las demás características de los maestros de Dios se basan en la confianza. Una vez que ésta se ha alcanzado, las otras se suceden naturalmente.

En el desarrollo de esa confianza habrá que pasar por muchos periodos difíciles en los que parezcamos tener que sacrificarnos en favor de nuestra entrega a Dios, pero no es más que la apreciación del ego. Renunciar a lo que no tiene valor no es ningún sacrificio. Lee sino el siguiente párrafo dentro del mismo apartado 4 del Manual para el Maestro, I. A Desarrollo de la confianza:

La tercera fase por la que el maestro de Dios tiene que pasar podría llamarse "un período de renuncia". Si se interpreta esto como una renuncia a lo que es deseable, se generará un enorme conflicto. Son pocos los maestros de Dios que se escapan completamente de esta zozobra. No tiene ningún sentido, no obstante, separar lo que tiene valor de lo que no lo tiene, a menos que se dé el paso que sigue naturalmente. Por lo tanto, el período de transición tiende a ser un período en el que el maestro de Dios se siente obligado a sacrificar sus propios intereses en aras de la verdad. Todavía no se ha dado cuenta de cuán absolutamente imposible sería una exigencia así. Esto sólo lo puede aprender a medida que renuncia realmente a lo que no tiene valor. Mediante esa renuncia, aprende que donde esperaba aflicción, encuentra en su lugar una feliz despreocupación; donde pensaba que se le pedía algo, se encuentra agraciado con un regalo.

Por todo lo anterior se podría decir que, simbólicamente, afilar la sierra en UCdM se basa más bien en cultivar y desarrollar la virtud de la confianza, con mucha paciencia, tesón y sin exigencias ni sacrificios. La confianza sólo se consigue con la práctica constante del perdón (entendido como el reconocimiento de las ilusiones como tales trascendiéndolas, no como el perdón tradicional que condena y luego perdona), hasta que se convierte en tu mayor y mejor hábito. Esto te permite vivir con amor y te lleva finalmente a poder completar la Expiación.

Afilar la sierra con un UCdM también se puede entender como la práctica de pulir o perfeccionar tu mente subiendo paso a paso la escalera de la salvación/Expiación. Es la corrección de tus errores de percepción hasta alcanzar el estado mental nivel Cielo. Cada diente de la sierra es un pensamiento en tu mente errónea transformado en un pensamiento de tu mente recta, lo que equivale a la subida de un peldaño de la escalera, o un pequeño milagro ayudándote a trascender este mundo un poquito más. Conforme más dientes de la sierra afilas más te acercas al Cielo. Este proceso no tiene nada que ver con el hábito de afilar la sierra de Stephen Covey porque no tienes que competir (entendido como una forma de atacar para el Curso). No se trata de volverte mejor que nadie, único o especial, ni de ganar, porque no estás en una carrera y no estás enfrentándote con nadie. Tampoco tienes el propósito de obtener algo de los demás. Simplemente confías en tu Guía y en el proceso aunque no lo entiendas, y esa confianza produce a su vez más confianza y así sucesivamente, hasta dar paso a las demás características del maestro de Dios.

Hermano, no des ni un solo paso en el descenso hacia el infierno. Pues una vez que hayas dado el primero, no podrás reconocer el resto como lo que son. Y cada uno de ellos seguirá al primero. Cualquier forma de ataque te planta en la tortuosa escalera que te aleja del Cielo. Sin embargo, en cualquier instante todo esto se puede deshacer. ¿Cómo puedes saber sí has elegido las escaleras que llevan al Cielo o el camino que conduce al infierno? Muy fácilmente. ¿Cómo te sientes? ¿Estás en paz? ¿Tienes certeza con respecto a tu camino? ¿Estás seguro de que el Cielo se puede alcanzar? Si la respuesta es no, es que caminas solo. Pídele entonces a tu Amigo que se una a ti y te dé certeza con respecto al camino a seguir. (T-23.II.22)


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Los 7 Hábitos de la Gente Altamente Efectiva... aplicada a UCdM? (6ª Parte)


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6º hábito: Utiliza la sinergia (confianza y responsabilidad)

Este hábito habla de saber cooperar y trabajar en equipo para conseguir lo que tú no conseguirías sólo por ti mismo. Da por hecho que eres una persona con las limitaciones a las que te ves sometido debido a tu condición de cuerpo físico y con una mente intelectual igualmente limitada, estando separado y aislado del resto de personas por tu individualidad. Para beneficiarte de la sinergia es necesaria la confianza en los demás y la responsabilidad para borrar esas limitaciones. Huelga decir que esa confianza y responsabilidad ha de ser mutua, y que no siempre sucede o no sucede todo el tiempo debido a la naturaleza del ego.

Precisamente el ego de las personas es el principal obstáculo a la sinergia debido a su creencia en la separación, la desconfianza y la irresponsabilidad, por lo que se ve en la tesitura continua de tener que decidir. ¿Hago ésto o lo otro? ¿Confío en este o en el otro, en nadie o en todos? ¿Me hago responsable o no me hago?. Todo el mundo ha tenido experiencias de trabajo en grupo así que sabe de lo que hablo. Utilizar la sinergia de forma exitosa desde el ego de manera continuada es más que un verdadero triunfo, una utopía. Ya no hablo de utilizar todos los hábitos a la vez.

En cuanto a relaciones humanas y sinergia, UCdM insiste en la necesidad de confiar en tu hermano, sin necesitar trabajar en equipo puesto que no se requiere al tratarse de un entrenamiento mental destinado exclusivamente a llevarlo a cabo sobre uno mismo. Así que si eres estudiante del Curso no necesitas acudir a grupos de estudio, ni asistir a ningún tipo de celebración grupal para practicarlo y obtener sus beneficios, ya que lo puedes practicar en el día a día con la gente con quien te relaciones sin que tan siquiera ellos lo sepan.

Dentro de las relaciones tenemos la que el Curso llama “relación santa”, la cual cumple por entero con el hábito de la sinergia sin tener ningún propósito especifico que lograr, puesto que cada miembro de la relación es total en si mismo, no necesita nada, y no anda preocupándose por lo que haga o piense el otro. En todos los casos la confianza y la responsabilidad es para contigo en primer y último lugar, porque como el Curso asevera, no hay “otros” ni existen “los demás” ya que todos somos Uno.

Resumiendo, UCdM no te exige formar un “equipo de milagros sinérgico” con el que poder salvar al mundo (el efecto), porque tú objetivo no está puesto afuera, sino adentro, en la corrección o sanación de tu mente (que es la causa), proceso al cual el Curso llama Expiación.

En esto es en lo que el maestro de Dios tiene que confiar. Esto es lo que realmente significa la afirmación de que la única responsabilidad del obrador de milagros es aceptar la Expiación para sí mismo. (M-7.3.1-2)

Para lograr la Expiación tienes que volcar tu confianza y responsabilidad en conseguir la sinergia, sí, pero con tu Maestro interno, el E.S. Una vez la consigues con Él, la consigues con “todos y todo lo demás”. Pero también consigues la salvación del mundo, ya que el mundo está en tu mente al ser tu proyección.

La única responsabilidad del maestro de Dios es aceptar la Expiación para sí mismo. La Expiación es sencillamente la corrección o anulación de los errores. Cuando se haya alcanzado, el maestro de Dios se habrá convertido, por definición, en un obrador de milagros. Sus pecados le habrán sido perdonados, y él ya no se condenará a sí mismo. ¿Cómo podría entonces condenar a otros? ¿Y habría alguien al que su perdón no pudiese curar? (M-18.4.5-9)


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  "Imagen satelital del río Amazonas fundiéndose con el Océano Atlántico.  Fuente: Agencia Espacial Europea (ESA), dominio público. La ...